¿Qué es?
La espirometría se considera un examen básico en la evaluación de la función pulmonar para fines diagnósticos, terapéuticos y de investigación, permitiendo reconocer las limitaciones obstructivas y restrictivas. Además, también puede ser utilizada para controlar el estado de los pulmones y verificar si el tratamiento pautado para una enfermedad pulmonar crónica está surgiendo efecto.
¿Presenta riesgos?
Por lo general, es una prueba segura. Sin embargo, es posible que el paciente sienta dificultad para respirar o mareo por unos instantes después de hacer la prueba.
Por otra parte, como requiere de esfuerzo físico, no se podrá llevar a cabo si el paciente ha tenido un ataque al corazón reciente o alguna otra patología cardiaca. En raras ocasiones, esta prueba desencadena problemas respiratorios graves.
Procedimiento de la Espirometría
- Sentaremos al paciente para realizar la prueba.
- Colocaremos una pinza en su nariz para mantener los orificios nasales cerrados.
- El paciente respirará profudamente y exhalará tan fuerte como sea capaz durante varios segundos dentro del tubo. Es importante que el paciente selle bien sus labios al tubo del dispositivo para evitar que se escape el aire.
- Se deberá realizar la prueba al menos tres veces para asegurar unos resultados congruentes. Si existe mucha diferencia entre los tres, se mandará repetir la prueba. Se registrará el valor más alto de los tres, siendo éstes similares entre sí.
- Todo el proceso, generalmente, dura unos 15 minutos.
- Diagnósticas
- Evaluación de síntomas o signos respiratorios.
- Medición del efecto de la enfermedad sobre la función pulmonar.
- Cribado de sujetos en riesgo de enfermedad pulmonar.
- Evaluación del riesgo de procedimientos quirúrgicos, especialmente torácicos o abdominales altos.
- Estimación de gravedad y pronóstico en enfermedades respiratorias o de otros órganos que afecten a la función respiratoria.
- Valoración del estado de salud antes del inicio de programas de actividad física intensa.
- Examen físico rutinario.
- Evaluación del deterioro/discapacidad
- Programas de rehabilitación.
- Evaluación de disfunción por seguro médico y valoraciones legales.
- Salud pública.
- Estudios epidemiológicos.
- Generación de ecuaciones de referencia
- Investigación clínica.
- Absolutas
- Inestabilidad hemodinámica.
- Embolismo pulmonar (hasta estar adecuadamente anticoagulado).
- Neumotórax reciente (2 semanas tras la expansión).
- Hemoptisis aguda.
- Infecciones respiratorias activas.
- Infarto de miocardio reciente (7 días).
- Angina inestable.
- Aneurisma de la aorta torácica que ha crecido o de gran tamaño ( > 6 cm)
- Hipertensión intracraneal.
- Desprendimiento agudo de retina.
- Relativas
- Niños menores de 5 - 6 años.
- Pacientes confusos o demenciados.
- Cirugía abdominal o torácica reciente.
- Cirugía cerebral, ocular u otorrinolaringológica reciente.
- Diarrea o vómitos agudos, estados nauseosos.
- Crisis hipertensiva.
- Problemas bucodentales o faciales que impidan o dificulten la colocación y la sujeción de la boquilla.
- Capacidad vital forzada: es la cantidad de aire máxima que puedes exhalar forzadamente después de inhalar tan profundo como se pueda. Una lectura inferior a la capacidad vital forzada normal es indicativa de una respiración restringida.
- Volumen espiratorio forzado: indica la cantidad de aire que el paciente puede forzar desde los pulmones en un segundo. Esta lectura ayuda a evaluar la gravedad de los problemas respiratorios y unas lecturas inferiores de esta medición indican una obstrucción más significativa.