PCA


¿Qué es?




La PCA es una herramienta que ayuda al paciente a controlar el dolor al permitirle autoadministrarse un analgésico mediante una bomba computarizada. El analgésico puede ser enviado al interior de una vena si hablamos de PCA IV o del espacio epidural, que sería la PCA epidural. La elección de un tipo u otro de PCA dependerá de lo que sea más adecuado para cada paciente.





¿Se puede usar en todos los casos?


La PCA no es adecuada para todas las personas. En algunos casos debemos prestar especial atención, como puede ser a pacientes mayores de 75 años (dosis menores y evitar infusión continua), también debemos tener en cuenta trastornos renales o hepáticos en los que el aclaramiento de morfina y sus metabolitos podrían estar alterados. 

El límite inferior de edad se suele situar alrededor de los 10 años, dependiendo de la capacidad cognitiva del niño y su capacidad para entender el uso de la PCA. En casos concretos se podría usar en niños de hasta 5 años. En el caso de pacientes pediátricos, tanto los pacientes como los padres deben ser seleccionados para su uso. 

Las principales contraindicaciones son: retraso mental, desconocimiento del idioma y un bajo nivel de conciencia.

¿Cómo se utiliza?


Para administrar el analgésico se debe oprimir el botón de la bomba cada vez que sienta dolor. Así la bomba enviará una dosis segura del medicamento recetado.

El botón solo debe ser oprimido por el propio paciente, nunca por familiares y amigos.

La bomba puede estar programada para administración de 2 formas:
  • Según se necesite: recibe el analgésico solo cuando oprime el botón. Estará programada para permitir solo una determinada cantidad por hora.
  • De manera continua: recibe el analgésico a un ritmo constante todo el tiempo. 
  • Combinados: a pesar de la perfusión continua, puede administrar dosis en bolo cada vez que se oprime el botón.

¿Tiene efectos secundarios?


El analgésico que le administran por medio de la PCA puede producir efectos secundarios:
  • Estreñimiento
  • Náuseas
  • Vómito
  • Boca seca
  • Comezón
  • Cambios en la vista, como ver cosas que no están
  • Somnolencia, mareo o confusión
  • Debilidad, entumecimiento u hormigueo en los brazos o las piernas
  • Problemas para orinar
  • Cualquier otro efecto secundario o problema
Es posible que el médico ajuste la dosis o le dé un medicamento diferente que surta menos efectos secundarios.

¿Cuál es el papel de la enfermera?


Bien, aunque colocar la bomba y elegir el analgésico que irá en ella no es papel de la enfermera, esta debe conocer el funcionamiento de las bombas de PCA y las indicaciones para su uso, puesto que será la encargada de explicarle al paciente su funcionalidad y cómo utilizarla así como de apagarla y retirarla si lo indica el médico.






Bibliografía

  1. Analgesia controlada por el paciente (PCA) [Internet]. Memorial Sloan Kettering Cancer Center. [citado el 26 de diciembre de 2022]. Disponible en: https://www.mskcc.org/es/cancer-care/patient-education/patient-controlled-analgesia-pca
  2. Analgesia controlada por el paciente (PCA) [Internet]. Zona Hospitalaria. 2019 [citado el 26 de diciembre de 2022]. Disponible en: https://zonahospitalaria.com/analgesia-controlada-por-el-paciente-pca/
  3. Revisado R, Fecha A, Gómez Sánchez E, Rodríguez Núñez A, Allende AV. PROTOCOLO DE ANALGESIA CONTROLADA POR EL PACIENTE (PCA) EN UCIP [Internet]. Secip.com. [citado el 26 de diciembre de 2022]. Disponible en: https://secip.com/images/uploads/2020/07/Analgesia-controlada-por-el-paciente-en-UCIP.pdf